Cuál es la mejor forma de estudiar
Impide saltar de un tema a otro de manera desorganizada. Esa técnica solo te dejará confundido y abrumado. En su sitio, cuente los temas que precisa estudiar y cree un plan de estudio que aspecto cuándo y de qué manera los va a estudiar. Al realizar esto, vas a saber lo que has estudiado, lo que te falta y las cuestiones que tienes que hacerle a tu instructor o monitor.
Si sentarse a leer conceptos te hace bostezar y perder el foco en algo, procura leer los temas en voz alta mientras que paseas por la habitación tal y como si estuvieses contando una historia. En el momento en que finalices de leer, regresa a sentarte y sintetiza lo que terminas de estudiar. Otros métodos que puede evaluar tienen dentro: hacer mapas mentales, detallar lo que estudia con sus expresiones, grabarse leyendo y oyendo activamente, utilizar fichas, hacer un código mnemotécnico, interrogantes y trucos mentales afines. Hay infinitas opciones. Tómese el tiempo para hallar el procedimiento que mejor se ajuste a sus pretensiones y su estilo de estudio.
Procedimiento Robinson
Es un plan de estudio estructurada en cinco pasos: examinar, preguntar, leer, recitar y revisar. Es realmente útil pues estimula la entendimiento y la aptitud de asumir nuevos conceptos.
Así, en la etapa de exploración se ofrece una lectura rápida del material, fijándose en sucesos y también índices para hacerse un concepto de lo que se marcha a estudiar. En el próximo paso, el alumno debe efectuar una segunda lectura con mucho más aspecto, y anotar todo cuanto no comprende para proponer sus inquietudes. De esta manera marcha la aptitud de razonamiento. En una tercera lectura, se tienen que destacar o resaltar esos conceptos mucho más esenciales, no solo para tener un concepto mucho más clara sino más bien para lograr recitar entonces, con sus expresiones, todo lo aprendido hasta hoy. Para finalizar, es conveniente comprobar en el final de cada tema y antes del examen, práctica que va a ayudar a rememorar y absorber el contenido.
Radica en armar tarjetas o ‘flashcards’ en las que por una cara se ha planteado una pregunta sobre el temario y por la otra se ha creado la explicación. El alumno va a deber responderlas y las que responda incorrectamente se clasificarán en una pila diferente que va a deber comprobar mucho más adelante. Lo que ofrece este procedimiento es el estudio mediante reiteraciones, de tal manera que se dedica mucho más tiempo a aquellas cartas que son mucho más bien difíciles de comprender.
Primero, cambia tu visión sobre el estudio
En el momento en que estudiar se transforma en una tortura, nuestro entendimiento crea resistencia, lo que te hace postergar las cosas al abrir ese libro y asimismo te hace difícil concentrarte, lo que te impide explotar al límite su tiempo de estudio.
De ahí que es esencial que mejores tu visión sobre los hábitos de estudio.
Haz una primera lectura superficial
Prepara todo tu material de estudio antes